La Propuesta


Encontrémonos para hablar del desarrollo armonioso de niños, niñas y adolescentes.

Padres, madres de familia y adultos, creciendo con los niños
Actualmente existen varias personas en el mundo buscando dar a los niños una educación que responda a diversas expectativas sociales, económicas y culturales.
Estas búsquedas han llevado a muchas familias alrededor del planeta a ampliar sus conocimientos y tener una mayor y mejor participación en la educación de sus hijos.
Investigaciones en biología, están arrojando nuevos e impactantes datos sobre el desarrollo de la inteligencia en los seres vivos. Cada organismo tiene la capacidad de cumplir con su plan genético de desarrollo, siempre y cuando el ambiente le brinde la oportunidad de satisfacer sus necesidades motrices, sensoriales, emocionales y cognitivas de manera autónoma; es decir que, permanentemente, puedan tomar las decisiones necesarias para crecer de manera integral y armoniosa en todos estos aspectos.
Los seres humanos somos organismos vivos de este planeta y necesitamos crecer en circunstancias que favorezcan de mejor manera, el cumplimiento de nuestro plan genético como humanos y nuestra realización como individuos.
Según J.Piaget y otros investigadores de los procesos biológicos, neurológicos y psicológicos de crecimiento humano, el desarrollo de la inteligencia de los niños es un proceso gradual que comienza en el embarazo y pasa por una serie de etapas durante los años de infancia, adolescencia y juventud, hasta llegar a la edad adulta.
Además, el ser humano, debido a la vulnerabilidad de sus primeros años de vida, su proceso de desarrollo necesita de ciertos elementos básicos de cuidado, protección y acompañamiento específicos, desde la concepción.
El análisis e investigación, por parte de padres y madres de familia y adultos que conviven con niños, del proceso interno,  intenso y permanente de desarrollo que vive el ser humano durante sus años de crecimiento,  es determinante en la calidad de presencia, amor y atención que dan al niño.
Esta praxis de respeto y amor con conciencia es lo que llamamos un Nuevo Paradigma de Vida.
No olvidemos que las características y circunstancias del proceso de crecimiento que vivimos desde la concepción y principalmente los dos primeros años de vida,  definen el 100% del adulto que somos.
¿Podemos como padres ser parte consciente del crecimiento de los hijos/as?
¿Es importante asumir esta responsabilidad?
¿Existe relación entre los problemas de aprendizaje y la atención que recibe un niño/a en el hogar?
¿Que relación existe entre trastornos de conducta y la falta de atención adecuada a los niños/as?
¿Es posible llevar una vida tranquila y realmente armoniosa entre los miembros de la familia?